PAKO RUIZ
Josu Urrutia lo anunció en su última comparecencia ante los medios de comunicación en Ibaigane. La mejora del estado del césped de San Mamés está en la agenda de la Junta Directiva que preside. Y es que el Athletic ha emprendido un estudio sobre las posibles medidas correctoras o tecnológicas que se puedan emprender para asegurar el buen estado del verde del nuevo campo, sobre todo en los periodos otoñales e invernales, donde la dureza de las condiciones climatológicas dañan la salud de los tepes, como se ha detectado en algunos de los encuentros disputados esta temporada.
El estado del césped no es alarmante. Ni siquiera se ha reclamado a Tapiz Verde, la empresa cacereña que suministró la alfombra de San Mamés, nuevos tepes que impliquen su replantación en determinados puntos del campo. Hecho que, en cambio, sí se ha dado en Ipurua, que también dispone de nuevo drenaje y del césped extremeño. El trabajo de la firma Cengotita, responsable del mantenimiento de La Catedraldesde hace años, es "totalmente satisfactorio", según indican en el club. Las irregularidades que sufre el césped suelen ser habituales entre diciembre y marzo, cuando la lluvia y el frío son los enemigos de la hierba, que deja de crecer.
El mal está diagnosticado. Se trata de buscar soluciones que lo erradiquen o lo mitiguen en gran medida, acorde a la genética de un campo cinco estrellas. En este sentido, el Athletic, como lo ha hecho saber a sus socios en San Mames Barria, valora la posibilidad de aplicar un sistema de iluminación artificial, una especie de rayos solares sobre el césped, con el que se ayuda a realizar la fotosíntesis, además de aportar calor y proporcionar un secado del exceso de humedad. El sistema permite que toda la hierba crezca por igual y evita la replantación en las zonas más sombrías. El asunto está en fase previa de estudio, ya que este sistema de insolación implica un fuerte desembolso económico que el club tiene que valorar en función de las necesidades y características de La Catedral.
La empresa holandesa SGL (Stadium Grow Lighting) presume de ser la pionera en este tipo de luminoterapia y aplica su particular proyecto en 125 estadios repartidos por todo el mundo, seis de ellos en el Estado español: Santiago Bernabéu, Camp Nou, Mestalla, El Madrigal, Cornellà-El Prat y Rico Pérez. Su sistema se argumenta en módulos o carros de diferentes tamaños con bombillas solares que reproducen los efectos de la luz natural, por lo que acentúan la función clorofílica, según defiende la empresa radicada en la ciudad holandesa de Rotterdam.
CORNELLÀ, REFERENCIA Este sistema se aplica a la carta. Cada campo o estadio exige un método particular. La referencia más cercana la marca Cornellà-El Prat, el complejo del Estado de más reciente construcción (2009), al margen de San Mamés. SGL opera con tres analizadores colocados en diferentes puntos del campo del Espanyol que controlan el nivel de humedad, la temperatura y la cantidad de luz solar recibida en cada punto del césped. Esos datos se transmiten vía GPS a los carros -cuatro de 25 metros de ancho y dos más pequeños para las áreas-, que se colocan con exactitud sobre las zonas afectadas del terreno.
Esta patente holandesa fue presentada en el Santiago Bernabéu gracias a la iniciativa de Paul Burguess, el especialista en jardinería reclutado por el Real Madrid procedente del Arsenal, que había rentabilizado las bondades del sistema SGL en Inglaterra. "El Bernabéu es uno de los estadios más grandes y oscuros de Europa, y eso es un problema para que crezca el césped. Si la hierba no recibe luz, no hace la fotosíntesis y acaba muriendo. La intención es hacerla crecer como si fuera de un modo natural. Este sistema lo utilizamos todos los días de invierno, pero ahora (primavera), en cambio, la luz es buena y paramos casi todas las luces", explicó en 2010 Burguess, elegido en cinco ocasiones mejor jardinero de la Premier League.
El Madrid no dudó en realizar entonces una inversión importante (no cifrada) para atajar los problemas que generaba su césped. Contrató una tecnología puntera, con tres unidades de alta potencia que SGL denomina MU160Flex, MU36 y MU18. El Barça se conformó para el Camp Nou con dos de estas tres infraestructuras. En el caso del Bernabéu, estas lámparas funcionan en invierno durante las 24 horas del día en el Fondo Sur y en el centro del campo, las zonas más sombrías del terreno. En primavera, su encendido se recorta a la mitad en estos dos puntos, mientras que en el Fondo Norte, el más luminoso, se limita a solo cuatro horas diarias. El desmontaje de estos carros, hasta treinta, supone cuatro horas de trabajo.
El Athletic prevé recabar el mayor volumen de datos posibles sobre un vanguardista sistema de luz artificial que, además de campos como el Santiago Bernabéu y el Camp Nou, también se aplica en feudos referencia a nivel mundial como Wembley, Emirates Stadium, Allianz Arena de Múnich, Juventus Stadium, el Parque de los Príncipes de París, el Estadio Único Ciudad de La Plata o el Estadio Olímpico Joao Havelange, entre otros. Mimos para campos cinco estrellas.
Fuente: DEIA
No hay comentarios:
Publicar un comentario